Dos putas culonas comparten una polla bien grande
El señor Chang ya está muy viejo y pensó que tenía que poner a alguien a cargo de la lavandería, luego de ver muchas opciones, llegaron dos culonas con cara de zorra que lo convencieron de contratarlas porque le chuparon la polla. Ahora ellas trabajan como encargadas y usan el local para compartir pollas gigantes. Tienen una lista de clientes donde marcan el tamaño de las vergas. Luego los hacen ir con cualquier excusa y ahí se follan a los tíos entre las dos. Todas las noches hacen un trio con algún afortunado que no fue precisamente a lavar ropa.