Ese día fue la puta de los obreros
Las cosas antiguas deberían derribarse y hacer cosas nuevas, es el sentido común pero en Europa es imposible: ahí la gente quiere restaurar todo. Ese día llega a su casa y nota que hay muchos obreros haciendo lo suyo cerca de su barrio y el ruido de las maquinas era insoportable, entonces la rubia no tuvo otra opción que negociar. En ese momento se convirtió en la puta de los hombres que estaban trabajando, luego que entre todos la follaron por todos los agujeros, incluyendo doble penetración, pudo tener unos minutos de paz y silencio en su propio hogar.