me desvirgue con una puta
Cuando era más joven, recuerdo que el perder la virginidad se convirtió en una obsesión para mi. Cada vez que mis amigos follaban y hablaban entre ellos de los polvos que echaban con sus amigas a mí se me llevaban los demonios. Como tenía un dinero ahorrado decidí invertirlo en una puta, una sabia elección.