No puede dejar de comerse el pollón de su novio
Algunas cosas están bien y otras están mal, pero para ella, todo lo que está bien, está dentro de su familia. Algunas chicas necesitan salir de la manada para encontrar algo que realmente les conviene, o aceptar lo que las zorras con mayor rango le quieran dejar, pero esta no puede dejar de comerse el pollón de su novio que tiene justo en su cama y en su propia casa. Así ya ni que salir a la calle porque no lo deja ni dormir. Solo espera que el descanse un poco y luego ella está a cada rato chupándole la verga con muchas ganas para que le luego le dé una follada en su rico coño.