Polvazo en el banco de la cocina
Si yo fuera amigo de esta pareja me plantearía eso de aceptar sus invitaciones para comer en su casa después de ver lo que se dedican a hacer en el banco de su cocina. No me imagino llevarme un buen plato de ensalada a la boca sabiendo que justo al lado de los cubiertos acaban de pegar un polvo tan bestial como este. Seguro que toda la comida que ingieren tiene un cierto saborcillo a sudor y semen…
