Qué difícil es follar con mi novia la gamer
Tener sexo con mi novia exige un ejercicio de inventiva que realmente se convierte en un desafío diario. ¿Por qué, te preguntarás, acaso es una puritana o una tía frígida? Pero nada de eso, solo es un pequeño detalle: mi novia es gamer profesional, y lo único que le gusta más que follar… es jugar videojuegos. Sin embargo, el porcentaje que separa sus dos aficiones es muy pequeño; así, cuando lleva horas jugando me pide un polvo encarecidamente, para liberar adrenalina con sus orgasmos. Ahora la complicación es buscar una postura donde ella pueda seguir agarrando el mando de su consola. Yo querría que me agarrara la polla, pero la sujeción de su coño vicioso es tanta, que me doy por satisfecho.