Rubia tetas operadas no para correrse abierta de piernas
Un hombre con una casa grande era lo que ella quería. Tan grande que ella tuviera que usar su móvil y llamarlo para saber dónde está. Tan grande que pueda recorrer grandes distancias para ir de un lado a otro. Lo suficiente como pasearse desnuda por todas las habitaciones y que su marido la mire mientras lo hace. Todo porque la rubia con tetas operadas es muy cachonda y sabe que luego le sigue una buen follada a su coño, ella con las piernas abiertas. Así no para de correrse y la muy puta sabe que mientras tenga una polla clavada de esa forma, le va a gustar.