Suertudo follando a la empleada del almacén
Un lugar donde las personas guardan cosas y luego se olvidan de ellas, hasta que mueren y alguien tiene que ofrecer dinero por algo que no sabe que es. Ahí mismo, trabajan unas personas en el lugar más aburrido del mundo. No pasa absolutamente nada. Por eso, es que la empleada del almacén se pone a cuatro patas para que el suertudo de su compañero la encuentre en esa posición y luego que vea el culo que tiene, se anime a meterle la polla. Este tío termina dándole una follada y ni siquiera tiene que ver su rostro. Lo mejor es que ahora podrá clavarla todos los días.