Tengo que follar a mi hija para que nadie más lo haga
El mundo en el que vivimos, es más que cruel. Parece que tanto progreso nos han llevado a un punto de comodidad, donde las más grandes perversiones de la humanidad, salen a flote y los más débiles, parecen ser los más afectados. Eso hace que cualquier padre este preocupado. Y yo no puede quedarme fuera. Al ver que mi hija puede caer en las garras de uno de estos niñetes que solo quiere usar el cuerpo de las chicas sin ofrecer nada de amor, me aterroriza. Por eso yo mismo tengo que follar a mi pequeña. Entiendo que necesita una polla dentro de su coño y para eso tiene a su papá.