Visita a su vecino para hacerle una mamada de polla
La vida nocturna le encanta, no es que este cansa ni nada parecido, pero también siente que necesita un poco de variedad: hacer esas cosas que hacen las personas aburridas y que lo hacen el día. Entonces se le ocurre que tiene que empezar a socializar con personas que trabajan o que apoyan al sistema, a ver de qué se ha estado perdiendo. Y por eso toca la puerta del vecino, su intención, además de aprender, es hacerle una mamada de polla y luego ver que tan rápido se le pone dura. Después ver si consigue que le dé una follada en su coño y también si puede hacerlo cada vez que quiera follar.